Señor guia mi camino y el de toda mi familia

Dicen que la primera obligación hacia nuestros hijos es hacerlos felices. Espero, hija, haber cumplido con este maravilloso mandato contigo.

MI BEBE ERES LA BENDICIÓN MAS GRANDE QUE DIOS ME HA DADO...

           

           DAYANA

 “Hija mía, tú eres la luz de mis días, mi gran felicidad, mi mayor alegría. ¡Te amo! Gracias por existir.”

MI VIDA CAMBIO DESDE QUE TU LLEGASTE A MI VIDA... LLENASTE DE LUZ MIS DÍAS, DE ALEGRÍA MI CORAZÓN CON TU AMOR INCONDICIONAL. SIN DUDA ALGUNA ERES LO MEJOR QUE ME HA PASADO. DOY GRACIAS A DIOS POR PERMITIRME COMPARTIR CONTIGO CADA UNA DE TUS LOCURAS, DE TUS OCURRENCIAS... NO TENDRÍA PALABRAS ´PARA DESCRIBIR TODO LO QUE MI ALMA SIENTE CADA VEZ QUE VEO TU ROSTO Y ESA SONRISA ANGELICAL QUE ME HACE SENTIR REALMENTE REALIZADA.

HIJA... MI VIDA SIN TI, NO TENDRÍA SENTIDO

 

NO HAY AMOR MAS GRANDE QUE EL QUE SIENTE UNA MADRE POR SUS HIJOS

 

DAYANA

 

MI MUÑECA, ERES LA RAZÓN DE MI VIDA...

 

 

 

 

 “Soy muy dichosa porque en la vida, me han sucedido cosas muy buenas, pero lo mejor que pudo pasarme es convertirme en madre de una pequeña tan bella como tú"

 

 

HIJA... ERES LA BENDICIÓN MÁS GRANDE QUE DIOS ME HA DADO

Hija: quisiera poder evitarte el dolor del aprendizaje, pero sé que te privaría del placer de aprender. Quisiera evitarte el dolor de las primeras frustraciones amorosas, pero te privaría de la madurez que brinda el sufrimiento. Quisiera poder evitarte los obstáculos que sin duda surgirán pero te privaría del orgullo de superarlos y así, descubrir tu propio poder de mujer.